Falsas dudas

Dicen que en una ocasión los dirigen-tes del PSOE hartos de las continuas provocaciones de sus colegas en el PSC comenzaron a repa-sar a los parlamenta-rios socialistas en el Congreso llegando a la desalentadora conclusión que solo contaban con la adhesión de Celestino Corbacho; esto significa que a pesar de que está contrastado que los votos los logra el socialismo español quien los administra realmente es un partido nacionalista federado con aquel; desde el punto de vista organizativo el PSC tiene varios miembros en la Ejecutiva del PSOE, mas la contrapartida es inexistente en Cataluña. También es verdad, que en el poder, todos los gobiernos socialistas han contado con militantes del PSC en importantes cargos ministeriales e institucionales. Ese desequilibrio, sumado a la egomanía y aislamiento de Zapatero que vive cegado por los votos que extrae en nuestra comunidad, resulta fatal para la salud social de nuestro país; en las últimas generales a pesar de la indiferencia catalana (focalizada entre el electorado socialnacionalista) el presidente ZP movilizó a los ciudadanos y logró 25 diputados en una gélida Cataluña; a pesar de lo anterior el cinismo y doblez de los socialistas catalanes ha renovado la presión contra su colegas del resto de España: Así, Jaume Collboni (director de campaña en el PSC) se atreve a aconsejar "En un momento de tensión como el actual, entre Madrid y Barcelona no es lo mas prudente que ZP visite en la campaña autonómica Cataluña" (posteriormente Iceta y otros dirigentes han corregido estas palabras en el sentido de que es con ZP que conseguirán la inhabilitación del Tribunal Constitucional, o la renovación del mismo); presentada la resolución del Parlament catalán para dicha renovación en el Senado se espera que en su pase al Congreso se concrete el desafío de los nacionalistas; el Conseller de Economía, Antoni Castell lo ha dejado claro en Catalunya Ràdio indicando que los socialistas catalanes deben actuar al margen del PSOE "Es mucho mas importante Cataluña que nuestra vinculación con el socialismo español. Lo que conviene es que todos los diputados catalanes se expresen juntos. Es lo que Cataluña nos pide, defender juntos el autogobierno"; Ernest Maragall, Conseller de Educación le ha secundado con la misma intensidad "Tenemos que hacer todo lo que esté en nuestras manos para respetar el Estatut y hacerlo respetar". A estos personajes se ha sumado el Pleno del Ayuntamiento de BCN que expresa "la preocupación por la incapacidad contrastada de un TC desgastado y desacrecitado". El nacionalismo sigue apretando, pulsando las debilidades del PSOE que apenas declara por boca de De la Vega "que el Tribunal Constitucional tiene plena legitimidad para pronunciarse sobre las leyes catalanas". A los nacionalistas ya les iría bien, retrasar la decisión de nuestro Alto Tribunal o bien lograr, que el mismo acepte definitivamente su incapacidad para pronunciarse (una aberración jurídica). Quieren que siga el Estatut en sus diversos desarrollos acabando de una vez por todas con el marco constitucional y la convivencia. ¡Dificiles tiempos!