Mientras los sindicatos catalanes, esas organizaciones laborales que estatutariamente se obligan a defender de forma independiente los intereses de los trabajadores, clarifican sus ininteligibles reivindicaciones y posiciones sociales manifes-tandose en la calle en este 1º de mayo (nos consta que dedican sus mayores esfuerzos en cargar contra el Tribunal Constitucional) la última encuesta de la EPA coloca a Cataluña con mas de 670 mil desempleados y en España hemos alcanzado el límite del 20% de paro. Los sindicatos unitariamente (UGT-CCOOO), siguiendo las consignas del gobierno socialista, atacan al sistema financiero y defienden los intereses de aquellos que tienen trabajo seguro (ampliando derechos de los militantes enchufados en la administración) olvidando por contra a los 5 millones de parados, a los mayores de 45 años, a los que en su unidad familiar no perciben ningún ingreso, a los jóvenes o a los pensionistas (y también autónomos). Los sindicatos oficiales, bien alimentados, están alejados del mundo real, desconocen el intringüilis de los conflictos laborales actuales, de la renovación tecnológica se sienten felices con la inacción socialista, y en "su buena voluntad" son incapaces de reconocer la implicación de ZP, o del tripartito, en el hundimiento económico de nuestro país y en la gravísima crisis institucional de España. Como todos los irresponsables se refugían en la responsabilidad. Ahora bien, hay algunas excepciones que cabe resaltar: Así nos enteramos que los dos sindicatos, UGT-CCOO se han unido al alcalde de Ascó, Rafael Vidal en apoyo de que esta localidad acoja "el cementerio nuclear centralizado" (esta ciudad de las tierras del Ebro presentó su candidatura junto a otras). En un acto convocado por el alcalde de CiU asistieron sindicalistas de la zona encabezados por José María Alvarez (SG de la UGT) y Josep Casadó (lider de Comisiones en la comarca); el Ministerio de Industria ha abierto el plazo de un mes para que los ayuntamientos presenten "las características geológicas de los terrenos de emplazamiento y las infraestructuras necesarias"; el alcalde de Ascó presentó en la asamblea el proyecto y la ubicación del almacén nuclear con el asentimiento favorable de los participantes, incluidos sindicatos. La candidatura de Ascó ha recibido el 22% de las mas de 14 mil alegaciones contrarias a las diversas candidaturas; ayer se manifestaban unas doscientas personas (con la presencia de ICV-EUiA) ante la sede de Endesa; pero no son los únicos: desde CiU, PSC, ERC, ICV, es decir, la clase política nacionalista se ha abierto un movimiento opositor a la instalación de esa infraestructura en Cataluña, en donde ha cabido todo: resoluciones parlamentarias, amenazas, intrigas, etc. El nacionalismo es partidario de ajustar la imagen real del territorio a su sueño ornitológico y forestal, cambiar el desarrollo industrial tradicional por la agricultura bucólica y ecológica. En realidad lo que está en cuestión es el desarrollo futuro, incrementar la producción energética o no, invertir en energías renovables y limpias, entre las que hay que incluir la nuclear, con tal de abaratar la producción industrial y crear empleo (nuestro primer cancer); en definitiva es mejor ser exportador de energía, continuar siendo un pais avanzado, que ser energéticamente dependientes.
sábado, 1 de mayo de 2010
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