El viejo poder de la coacción en el mundo nacional.

El añorado Colom, utilizado por Convergència como puente de engarce con ERC, para desplazar al PSC, parece ser que ha encontrado el camino que justifique su sueldo. El otro día se reunió con cuarenta personas (reunión convenientemente filtrada a la prensa), mayoritariamente convergentes y algun otro de esquerra, anunciando que está dispuesto a recrear "la Crida per la solidaritat" para combatir el españolismo que ha dado a luz "El Manifiesto por la lengüa común". El exdirigente republicano y del Partido por la Independencia, hoy militante de Convergència, lo tiene claro hay que reproducir el viejo cliché de aquel movimiento que arreplegó a unos cuantos descamisados nacionalistas para combatir al Manifiesto de los 2.300. Estimulados y subvencionados (?) por el pujolismo aquellos desocupados y heroicos fantoches, nuclearon una vanguardia respaldada políticamente por la larva ignorante del Oasis (que nos adormecía a muchos). En medio de la movida (guerra de banderas, freedom for catalonia, etc.) se produjo el atentado criminal contra Federico Jiménez los Santos, símbolo hoy de la resistencia de los justos. En 1981 en el Camp Nou bajo el lema Som una nació, con el apoyo de todas las fuerzas políticas, desde los comunistas hasta Convergència, pasando por los socialistas y con interpretes como Lluis Llach, alcanzaron las estrellas. Después vino el exilio interior de aquellos valientes y la marcha a otros sitios de muchos, buscando nuevos horizontes. Aquella flor y nata de la resistencia a la depuración ideológica, hoy tiene tribunas orales y escritas, que nos ayudan a entrever la libertad. Este hombre de paz, como le agrada que le digan y de hecho le dicen plumillas y encantadores, sumó en el partido de acogida ERC, a toda esa basura terrorista de Terra Lliure, erigiéndose en el dirigente que le dió a Esquerra ese poso independentista del que hasta allí carecía. Y limpia la casa grande del catalanismo se pueden colocar los muebles. Aquellos cien o algo más de fieros jovenzuelos en la ola del poder, se resituaron en el extremo, justificando su propio sentido trascendente, situar a CiU en el centro político, dar la apariencia de moderación a la doblez pujoliana. No se quién me comentó que Angelet (o Angelillo) Colom, maestro efébico y de pasado religioso profundamente arraigado (dejad que los niños se acerquen a mí), natural de Osona, la comarca mas íntegrista de Cataluña, en pago a sus servicios fué enviado al reino de Marruecos por sus mentores como embajador de la cosa nacionalista, en donde colocando en mas de un brete a las autoridades diplomáticas españoles, ha podido descansar todo este tiempo disfrutando del bello espectáculo de la inquieta juventud magrebí. Ahora, se dirige a los cuarenta acólitos del Ayete nacional y nos amenaza bíblicamente "si nos atacan como país hemos de responder, siempre con formas no violentas. Catalunya ha de contestar porque vivimos una ofensiva españolistas tremenda". Y siguió "la nueva Crida ha de ser un movimiento transversal", ¿verdad que suena?. Ahora se plantea la recreación del nuevo movimiento el próximo 11 de septiembre. Que bien, cualquier tiempo pasado fué mejor. El diario el Mundo (en donde leo la noticia) preguntaba en Convergència y obtenía como respuesta "Angel es un gran dinamizador y promotor incansable de este tipo de cosas" "contará con la complicidad de dirigentes y militantes de Convergència". De nuevo el muñequito de Rupit-Pruit tiene una misión encomendada, plantar una línea, una trinchera tras la que se tienen que situar todos los nacionalistas agrupados, todas las fuerzas con sentido esencialista de país. A su lado, eso si sin apoyo explicito del Partido-organización, estará el pujolismo, que le dará alas para que se concrete en movimiento-fuerza antiespañola y vuele de forma independiente. De esta manera los moderados convergentes e impotentes repúblicanos, partidos de gobierno, recuperaran la centralidad. Si se producen excesos tendrán la posibilidad de sermonear a "sus muchachos". Se trata de que alguién, los bárbaros, los nuevos almogavares, resitúen las cosas, acaben con el debate de las libertades públicas e individuales de los ciudadanos de Cataluña, nuestros derechos como personas a la igualdad, nos romperán la cabeza, levantarán un rúgido, un grito para que entendamos de una vez por todas que las libertades, las nuestras, estan subordinadas al derecho nacionalista dominante. Nuestra condición debe ser la de esclavos.