Otro 9 de marzo

El nacionalismo mas radical está invitado a un nuevo acto de impunidad política. Plataformas encubridoras, que trabajan por la independencia, como "Decideixo decidir" y "Sobiranía i progrês", tienen la intención, hecha pública días atrás, de colocar el domingo mesas de recogida de firmas "a favor de las convocatorias de Referendums desde Cataluña" en las mejores calles y plazas de nuestras ciudadades, Tortosa o Barcelona, Puigcerdá o Vic, Ripoll o Valencia, etc. etc. Sin ningún reparo, al contrario absolutamente provocadores, inspirados por el complaciente poder oficial nacionalista que controla aquí la menor disidencia (experiencia de ello tenemos los ciudadanos de a pié), y que resulta también estimulante desde el punto de vista económico, sus promotores ensanchan su influencia, abriendo foros de debate en barrios y ciudades, comprometiendo a voluntarios vía internet, y convocado ruedas de prensa que publiciten la noticia al extraradio geográfico. Hay gente, algunos amigos, a los que todo eso les parece bien, que lo aceptan como una cosa normal, y que te dicen que hay que evitar la crispación ya que al fin y al cabo el asunto de fondo compete a una minoría de exaltados. Estoy profundamente en desacuerdo. Cualquier persona digna no debe aceptar ese descarado alegato de la secesión como si fuera una cosa normal, porque la Ley, el imperio del derecho debe proteger al ciudadano corriente y moliente condenando el delito y al delincuente extremista. Para esa gente, que tiene dicho y escrito que el Sr. Hernando, representante de los jueces es "un franquista", y España (país de pueblerinos ignorantes), una entidad fracasada que sujeta con bota militar la egregia cabeza catalana, la acción catalanista del 9 de marzo, es un ejercicio de soberanía, un derecho que se conquista rompiendo la legalidad opresiva española, y que les permitirá crear una correlacion de fuerzas diferente, en la que el ciudadano futuro escoja en base a su conciencia nacional. Hay que balcanizar el pais. Nos birlan el Código Penal y se chorrean o chotean de la normativa electoral, sustituyendo y alterando la accion soberana del pueblo. Si la democracía es participación, y en unas elecciones generales el pueblo se manifiesta libremente ejerciendo un poder constitucional reconocido, estos señores atacan directamente los derechos básicos. Es una versión moderna, del grito fascista "de que lo mejor que se podía hacer con las urnas era romperlas". Deprime que nadie, y pienso en todos los partidos incluidos UPiD y C's, se haya atrevido a denunciar preventivamente ante la Junta Electoral el caso. Llegas a pensar que los criminales cuentan con demasiadas protecciones en las alturas y en las bajuras de la política. En estos tiempo, después de lo que hemos visto, como es posible que personajes como Alfons López Tena continúen siendo miembro (lo fué a propuesta de CiU) del Consejo General del Poder Judicial designado por el Congreso de los Diputados. Es que no es posible desautorizarle y formalmente solicitar su deshabilitación. Aunque a las mejores siempre nos quedará París y la posibilidad de recoger firmas entre los desahuciados.