Un grupo de amigos de Masquefa en la comarca de la Anoia acordaron levantar el toro de Osborne, que un grupo independentista absolutamente desconocido "Germandat Catalana La Bandera Negra" había derribado hace un año, o sea el pasado 3 de agosto. Dicho y hecho la peña se puso en marcha y han izado la noble figura negra del toro bravo en el decorado de fondo de Montserrat. La última restauración la había hecho la casa Osborne sufriendo el aserramiento de las patas y la posterior caida de la mastodontica figura publicitaria por parte de "los valerosos independentistas" que se engloban en la Unió Nacional Catalana, que declararon "Hemos limpiado la Sagrada Montaña de Montserrat de la inmundicia cornuda española que pretende ensuciarla". Ahora, a pesar de que la empresa originaria habia anunciado que volvería a colocar la imagen la iniciativa viene del paisanaje comarcal que anuncian "lo habriamos vuelto a poner con o sin permisos, con o sin la ayuda de Osborne". Como han actuado a cara descubierta, han utilizado sus propios medios y trabajado duro, al pie del morlaco revivido celebraron el acontecimiento con un regocijante almuerzo. El propietario de los terrenos está supercontento de que el toro bravo, salude a los coches que circulan por la A-2 desde su finca. En estas fechas en que se celebra el doscientos aniversario de la conocida batalla del Bruc en la que un grupo de somatens y desertores del ejercito regular derrotaron al ejercito francés en una de las batallas mas pintorescas de la Guerra de la Independencia, este grupo de amigos que "no pretenden hacer política y si devolver un símbolo histórico a la montaña, se sienten comprendidos por unos y rechazados por rabiosos radicales que tildan al toro de simbolo españolista. A ellos les gusta el toro y por eso el 17 de mayo aunaron esfuerzos, pagaron a escote los medios y levantaron lo que los vándalos habían destruido. Y ahí se yergue en la montaña la bella figura de la furia nacional. El toro, protagonista de la fiesta nacional, es el símbolo nacional por antonomasía así unánimemente reconocido, casi diría internacionalmente. Un ataque a la maqueta es un ataque a la nación que España representa. Y aunque sesudos o descerebrados personajes del ámbito nacionalista se esfuerzan con la imagen del "burro autóctono" creando una figura local de corte nacionalista incompatible con la del toro, no lo han logrado. El toro lo admite, lo acoge todo. Todavía hay ciudadanos catalanes, que con sus actos, lo demuestran.
Y es que burros, borriquillos hay de muchos tipos
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